1. Las habitaciones en las que hay cocinas, calentadores o estufas de gas tienen que disponer de ventilación que comunique con el exterior, ya que en caso contrario hay peligro de intoxicación o de explosión si se produce un escape de gas.

2. Las estufas pueden originar un incendio. Manténlas alejadas (como mínimo un metro) de otros objetos que puedan quemarse, como por ejemplo sofás, cortinas, ropa puesta a secar, etc.

3. Las velas también pueden ser peligrosas. No las dejes nunca encendidas sin vigilancia ni tampoco cuando te acuestes o salgas de casa.

4. No dejes nunca a los niños pequeños solos en casa. Si tienes que salir, aunque sea un momento, déjalos al cuidado de algún adulto (un vecino o una vecina, por ejemplo).

5. Mantén los fósforos y los encendedores fuera del alcance de los niños.

6. Antes de salir de casa o de acostarte, comprueba que no se queda encendido ningún aparato que pueda originar un incendio (estufas, fogones, etc.) ni ninguna vela, y cierre las llaves de paso del gas, recuerda que somos un país sísmico.

7. No conectes varios aparatos en un solo enchufe múltiple y manten en buen estado la instalación eléctrica. No hacerlo supondría un grave peligro de incendio.

8. No utilices aparatos de ningún tipo en mal estado (estufas, cocinas, refrigeradores, etc.) y no los manipules ni repares si no sabes hacerlo correctamente.

9. No fumes en la cama y no tires las colillas en cualquier sitio. Asegúrate de que queden bien apagadas.

10. No dude en llamar a los bomberos cuanto antes mejor, al teléfono 132 (servicio gratuito).